EL ARTE DE LA MEDICINA CHINA -Principios básicos-
“La salud como equilibrio de las energías vitales es la base de la medicina china.»
La correcta práctica de este arte requiere del conocimiento de las bases filosóficas, físicas y energéticas que regulan el ser humano y que hacen posible la concepción de la salud como un equilibrio total. Es por eso que en China, para ser médico, se precisa de un aprendizaje junto a un Maestro. Este es un método curativo muy antiguo. La vida actual tiende a producir un desequilibrio energético que conduce a la enfermedad, pero las diferentes técnicas de que consta la medicina china, acupuntura, tueina (masaje chino), chi- kung, etc., permiten un tratamiento correctivo e integral de las enfermedades.
El Dr. Su Yu-Chang, después de 15 años de estudios, se graduó como médico y pasó a dar clases en la Universidad de Taiwán, enseñó también en la Universidad Fon-Chia donde impartió clases de medicina, filosofía y artes marciales. El Dr. Su, fue discípulo del gran Maestro Fu Po Ming (tío y médico personal del último emperador de China, Pu Yi) y es uno de los últimos maestros en el arte del manejo de las energías vitales del ser humano siendo capaz de aplicarlas tanto en el campo de la medicina como de las artes marciales y la filosofía. Sus enseñanzas abarcan las técnicas de acupuntura, tueina, kung fu, en todos sus aspectos y especialmente como terapia de salud (chi-kung, tai chi), filosofía budista, taoísta, y meditación.
YIN YANG
La medicina china admite que todo lo que existe en la naturaleza esta formado de yin y de yang, fuerzas opuestas, pero complementarias, actuando unas sobre otras y en perpetuo movimiento. El nacimiento y el crecimiento, la transformación y la destrucción de todos los seres y de todas las cosas están basados en el principio de la mutación continua del yin del yang. El yin y el yang, es por lo tanto, el origen de la transformación y creación de todas las cosas, de todos los seres del Universo. En medicina, las actividades orgánicas, la aparición y desaparición (equilibrio y desequilibrio) de la enfermedad también están ligadas a los fenómenos de mutación yin yang, cuyos caracteres esenciales son la oposición y la complementariedad.
Las relaciones complementarias del yin y el yang impregnan todo el universo y su oposición elemental proporciona la tensión dinámica necesaria para cualquier cambio o movimiento. En medicina china, por ejemplo los 10 órganos vitales se consideran divididos en 5 pares, cada uno de los cuales se compone de un órgano yin (macizo) y un órgano yang (hueco).
Los órganos yin son más vitales que los yang, y las perturbaciones de aquellos son las que causan los más graves problemas de salud. Los órganos no están organizados arbitrariamente, sino que los unen conexiones funcionales concretas. En el cuerpo humano yin controla las superficies internas, las regiones inferiores y la parte delantera, tanto en el cuerpo en su conjunto, como en cada órgano individual, mientras que yang rige las superficies externas, las regiones superiores y las partes posteriores. Yin controla la sangre, yang gobierna la energía. Los instintos innatos pertenecen a yin, las habilidades adquiridas a yang. En la respiración inspirar es yin, espirar es yang, etc. La lista de complementarios es interminable, pero la cuestión es siempre la misma, nada existe ni actúa si no es en directa conjunción con su propio opuesto básico, y todos los fenómenos anormales, desde la enfermedad hasta las tormentas eléctricas, se deben a un desequilibrio entre estas dos fuerzas.
5 ELEMENTOS ( WU CHIEN )
La teoría de los 5 elementos explica en más profundidad las relaciones cosmológicas entre el hombre y el universo permitiendo así la descripción de las realidades. Son fuerzas activas no inertes que proporcionan los medios para definir las características de la realidad material. Estos elementos son: la madera, el fuego, la tierra, el metal y el agua los cuales abarcan todos los fenómenos naturales de la naturaleza. Estas 5 fuerzas actúan según unas relaciones determinadas basadas en sus características, así cada una de ellas es generada (nace) por otra, y dominada (destruida) por una tercera.
Así la madera al arder engendra el fuego, el fuego produce cenizas que engendran a la tierra, la tierra engendra el metal que se extrae de ella, y éste al ser calentado, se funde, con lo que engendra el elemento agua, el agua favorece el crecimiento de las plantas con lo que engendra la madera. En el ciclo destructivo la madera agota las sustancias nutritivas del suelo, con lo que acaba con la tierra, ésta enfanga y canaliza el agua, de modo que la “conquista”, el agua elimina el fuego extinguiéndolo, el fuego elimina el metal, fundiéndolo, y el metal suprime la madera al cortarla.
El ciclo generativo recibe el nombre de relaciones “madre – hijo”, mientras que el ciclo dominante se compone de las relaciones “vencedor – vencido”. Sus interacciones constantes producen los incontables fenómenos del universo, entre ellos los desequilibrios en el organismo del cuerpo “enfermedad”. Estas 5 fuerzas se manifiestan en el cuerpo humano a través de los 5 grupos de órganos emparejados que son: riñón – vejiga, hígado – vesícula, corazón – intestino delgado, bazo – estómago y pulmón – intestino grueso. Las permutaciones y combinaciones de este sistema son complejas y el especialista en medicina china debe aprender a relacionar todos los factores, internos y externos para emitir su diagnóstico y a continuación aplicar el mismo sistema de fuerzas en un sentido inverso para conseguir la curación, lo cual exige una gran experiencia clínica.
LOS TRES TESOROS
“El Tao engendra al Uno, el Uno engendra al Dos, el Dos engendra al Tres, y el Tres engendra a los 10.000 seres…”
Lao Tse
Una vez establecido el concepto de yin y yang que hace posible la descripción de una realidad y Wu Chien (5 elementos) que proporciona las herramientas para realizar la descripción de la misma, el ser humano contempla la realidad que se manifiesta y no se sitúa como un mero espectador, sino que percibe y forma parte de la realidad, contribuyendo a la conformación de la misma. La representación completa de la realidad, por tanto, exige pues el tercero que da lugar a una representación completa. Así pues existe el cielo y existe la tierra, pero para poder conformar la realidad hace falta que en medio aparezca el hombre que es el que la percibe.
Los tres tesoros de la vida son Esencia (representada por nuestro cuerpo), Energía (que activa las funciones vitales del organismo) y Espíritu (que se manifiesta tanto en nuestros pensamientos como en nuestros sentimientos, tanto en la voluntad como en la intención) y entre ellos abarcan los tres niveles fundamentales de la existencia en todos los seres vivos: el físico, el energético y el mental. Cuando permitimos que los estímulos ambientales y emocionales los gobiernen, sucumben al debilitamiento y al deterioro. Los tres tesoros se consideran el legado natural de la vida que todos los seres vivos reciben al nacer y son su fuerza y equilibrio mutuo los que determinan la salud y la longevidad humana. Los tres tesoros junto con la teoría del yin y el yang y los 5 elementos constituyen el marco teórico del diagnostico y la terapia en la medicina china, así como de las artes marciales y de la meditación.
ACUPUNTURA
La acupuntura es una Medicina energética que forma parte de la Medicina Tradicional China. Ésta se estructura sobre los principios filosóficos que han existido, especialmente el TAOISMO. La acupuntura es ante todo una medicina preventiva que trata de armonizar al hombre en su dinamismo constante entre el cielo y la tierra: El cuerpo humano está recorrido por unos canales invisibles (meridianos) a través de los cuales circula la energía. A lo largo de estos canales existen unos puntos en los que la energía se concentra especialmente, y su manipulación con las agujas de acupuntura puede mantener el equilibrio y la armonía del organismo. El acupuntor es una persona que conoce las leyes del Universo en sí mismas y en su relación con el hombre, que conoce la existencia de los canales, de energía de nuestro organismo y la circulación de la energía a través de estos.
La acupuntura es, por tanto, un sistema filosófico dentro de la medicina china que consiste en clavar agujas en el cuerpo humano con fin terapéutico. Realmente, el hecho de pinchar es fácil, una acción que cualquiera puede hacer, lo complicado es conocer todo lo que implica: el conocimiento de la anatomía del cuerpo, fisiología del organismo, lugar de inserción de la aguja, cómo hacerlo, a qué profundidad, la relación de meridianos, las compatibilidades e incompatibilidades de éstos, etc… y sobre todo el chequeo inicial del paciente (pulso, observación de labios y boca, ojos, lengua, etc.) que es toda aquella información que podemos recapitular de la observación física y la comunicación con el paciente, para establecer un diagnóstico adecuado que nos permita encontrar la raíz del desequilibrio, la causa de mal o enfermedad para erradicarla definitivamente.
En la actualidad la ciencia médica se ha tecnificado mucho y ha pasado a un segundo plano la parte humana, el contacto médico-paciente, de ahí la importancia de este chequeo inicial en el que se basa la medicina tradicional china para establecer el diagnóstico, pues contempla a la persona como un ser vivo y se preocupa por lo que siente, más que en el principio de causa-efecto.
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